Cerca de medio millón de bajacalifornianos perdieron el acceso a servicios de salud en 4 años y, tras la pandemia, hay un retroceso de dos décadas en educación, afirma el presidente del organismo, Luis Valero Berros.
En cuatro años cerca de medio millón de bajacalifornianos (454 mil 100) perdieron el acceso a un servicio de salud, debido principalmente a la desaparición del Seguro Popular y al crecimiento de la informalidad, dijo este viernes el presidente del Centro de Estudios Económicos de Baja California, Luis Roberto Valero Berrospe, al refutar “las cifras alegres” del gobierno tras el análisis del Coneval respecto a la encuesta sobre ingresos y gastos de los hogares 2022 del INEGI.
Resaltó que “como de costumbre”, el gobierno y sus partidarios han magnificado las cifras favorables, mientras que los retrocesos han sido ignorados, y adelantó que la verdad de las cosas es que “los avances son modestos y los rezagos grandes”.
El año pasado —puntualizó— había un millón 85 mil 800 bajacalifornianos con carencia por acceso a los servicios de salud, lo que significa un crecimiento del 71.9% entre 2018 y 2022. A esto hay que agregarle que por la pandemia hubo un estancamiento de cuatro años en la esperanza de vida y estamos por ingresar a la etapa de envejecimiento demográfico.
Por otra parte, indicó que, de acuerdo con estimaciones del Banco Mundial, la pandemia causó en México un rezago en el sector educativo que equivale a dos años de escolaridad que, aplicado a Baja California nos lleva a un retroceso de dos décadas. De 10.2 a 8.2 años promedio “y ningún funcionario ha hablado de esto”; el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) nos dice que la población con rezago educativo que había disminuido ahora está por encima del nivel del 2016, puntualizó.
Luis Roberto Valero Berrospe apuntó que lo que no se dijo es que, aunque el indicador general de pobreza en la entidad se redujo en 9.1% el Coneval es puntual al subrayar que no se debe perder de vista que se está midiendo la pobreza multidimensional; es decir, se trata de una medida de la pobreza que considera la observación de diversos factores presentes en los hogares, desde su nivel de vida básico hasta el acceso a escolaridad, agua limpia y atención de salud.
La pobreza multidimensional, explicó, toma en consideración las múltiples carencias que pueden padecer los individuos en forma simultánea, situación que les priva del desarrollo pleno de sus capacidades “como señala el Premio Nobel de Economía 1998, Amartya Sen, en su Enfoque de Capacidades. En pocas palabras, no todo se concentra en el ingreso”, destacó Valero Berrospe.
“De dónde vino la disminución de la pobreza con unos salarios empobrecidos?”, preguntó el economista, y señaló que el “Conservative Daily News” fue uno de los múltiples medios informativos que no creyeron esa magia y encontraron la respuesta “en la monumental cifra de ingresos desde Estados Unidos vía remesas y, en Baja California, a través de los ocupados legales en el vecino país”.
Añadió que la población vulnerable por carencias sociales con un millón 454 mil 300 bajacalifornianos, alcanzó en nuestro estado la cifra más alta desde que se lleva registro. Aquí se trata —especificó— de aquella población que presenta una o más carencias sociales, aunque tenga un ingreso superior a la línea de bienestar.
Asimismo, añadió, el porcentaje de personas con al menos una carencia social se ubicó en el 51.4% de la población, un descenso menor con respecto al 57.9% de 2018, pero el dato para 2022 equivale a un millón 965 mil 300 personas en esta situación, que continúa siendo la carencia con mayor incidencia en pobreza.
Cabe subrayar que —indicó—, en algo más de la mitad de los hogares de Baja California trabajan dos de sus miembros, lo que compensa “los vergonzosos salarios que se pagan”, lo cual ha llevado también a que muchos bajacalifornianos se vayan a la informalidad. Es interesante —resaltó— ver cómo a partir de 2018 el empleo precario (hasta 2 Salarios Mínimos) se aceleró hasta casi un millón 200 mil.
Manifestó que la misma Secretaría del Trabajo, en uno de sus reportes, ilustra que la diferencia de ingresos entre los ocupados formales e informales es mínima. Otra salida para los bajacalifornianos —dijo—, es la contratación legal en Estados Unidos. Baja California concentra al 51% del total de los residentes de los estados fronterizos que tienen permiso para ocuparse en ese país.
Ante este panorama, a final de cuentas la interpretación gubernamental del análisis del Coneval a la Encuesta de Ingresos y Gastos de los Hogares 2022 del INEGI es “mucho ruido y pocas nueces”, finalizó el presidente del Centro de Estudios Económicos de la entidad.
