Los padres jóvenes comparten sus opiniones sobre el tiempo frente a la pantalla, el género, la religión y la escuela.
Muchas cosas pueden venir a tu mente cuando escuchas “Gen Z“. Tal vez hayas escuchado que no sueñan con el parto. Que les encanta odiar a los millennials. Que son la generación más solitaria, o la más rara. En cualquier caso, es difícil no imaginarlos de niños.
Pero la generación que creció con Internet, el empeoramiento del cambio climático y una pandemia, entre otros eventos que dieron forma a la perspectiva, sí ha crecido. De hecho, ahora están teniendo sus propios hijos, y al igual que están cambiando las conversaciones sobre el trabajo, la religión, las redes sociales, la moda y la salud mental, también están cambiando la práctica de la crianza de los hijos .
A continuación, VICE preguntó a los padres de la Generación Z (y a los futuros padres) de Filipinas cómo están criando a sus hijos, desde su opinión sobre la educación, el género y el tiempo frente a la pantalla hasta lo que aprendieron a no hacer de sus propios padres.
Vía Maniquis, 24
Via y su socio millennial Jorrel crían juntos a su hijo Jadon, de 2 años.
VICE: ¿Cuánto tiempo frente a la pantalla le dejas tener a Jadon?
Vía: Al llegar a la paternidad, siempre nos dijimos que no dejaríamos que Jadon tuviera tiempo frente a la pantalla, pero esa era una expectativa poco realista. Antes de que cumpliera 2 años, no lo expusimos a nada de eso, pero ahora que es un poco mayor, está cautivado por el mundo digital. Usamos el tiempo de pantalla como tiempo de inactividad para él y lo limitamos a una hora por día. También ayuda con nuestra cordura como padres cuando queremos tener una comida adecuada en paz. Cada padre es diferente y respeto cada manera, pero esto es justo lo que funciona para nosotros.
¿Qué tipo de trabajo quieres que tenga Jadon cuando crezca?
En un hogar filipino, normalmente escuchas a los padres mayores decir que quieren que te conviertas en médico o abogado, pero en la época actual, hay muchas cosas que él puede explorar. Por tonto que parezca, nuestro hijo puede ser quien quiera mientras lo haga feliz.
“Por tonto que parezca, nuestro hijo puede ser quien quiera mientras lo haga feliz”.
¿Qué es lo mejor de ser un padre joven?
Ser padre es mucho trabajo. Es agotador física, mental y emocionalmente, pero creo que lo mejor de ser un padre joven es que hay menos diferencia de edad [entre nosotros y nuestro hijo], por lo que podemos seguir el ritmo. Me encanta que podamos acceder a nuestro niño interior nuevamente y experimentar cosas simples que solíamos amar a través de los ojos de nuestro hijo.
Daniela Marcos, 26
Daniella es madre soltera de Lucas, de 5 años.
¿Qué es lo que hicieron tus padres mientras te criaban que quieres hacer diferente con Lucas?
Daniella: Como filipinos, estamos algo moldeados para ser obedientes y agradables porque estar en desacuerdo se considera una falta de respeto. Si bien creo que es importante respetar a nuestros mayores, también creo que el respeto debe ser mutuo. Entonces, en cualquier momento en que nos sentimos irrespetados, deberíamos poder expresar por qué. Hay un gran valor y libertad en saber lo que estás dispuesto a permitir en tu vida y lo que no. Entonces, desde una edad temprana, quiero que [Lucas] tenga una base sólida de sus límites y pueda expresar libremente lo que le sirve, lo que no, y entender por qué.
¿Cuál es tu opinión sobre el género?
No creo que esté criando a mi hijo para que sea convencionalmente masculino. Se trata más de fomentar un espacio abierto y seguro para mi hijo. Le permito explorar lo que quiere para que siempre se sienta seguro al acudir a mí sobre cualquier cosa que pueda resultarle confusa. Amo a mi hijo por lo que es, no por lo que espero que sea.
“Amo a mi hijo por lo que es, no por lo que espero que sea”.
¿Crías a Lucas con cierta religión?
Crecí como católico y fui a una escuela católica toda mi vida. Mis abuelos también son muy religiosos y se esforzaron por dejar a Jesús en nuestros corazones, así que creo en el catolicismo. Pero también he llegado a no estar siempre de acuerdo con todo lo que la Iglesia ha enseñado. Lo que me quedó grabado es tener fe en un ser superior. Es reconfortante saber que, en las buenas y en las malas, siempre hay alguien que te cuida y alguien que tiene un plan para ti. Viniendo de un trasfondo católico, esa es realmente la única religión que puedo impartirle a mi hijo, pero si él siente que resuena [con] o disfruta más de otra religión, entonces estoy abierto a dejarlo explorar eso y aprender de él.ANUNCIO PUBLICITARIO
Lukas Wintermahr, 25, y Dani Luna-Wintermahr, 25
Lukas y Dani esperan su primer hijo a finales de julio o principios de agosto.
¿Qué es lo que hicieron tus padres mientras te criaban que quieres copiar o hacer diferente mientras criabas a tu hijo?
Lukas: Mis padres siempre expresaron que siempre estarán ahí para mí y apoyarán el crecimiento de mi propia familia. Centraron su atención en mis talentos, que eran los deportes, a una edad temprana y me hicieron entender que en la vida siempre necesitarás un equipo detrás de ti, un sistema de apoyo. Mi esperanza es que nuestra hija comprenda que siempre estaré ahí para ella en cada etapa de su vida, para apoyarla, guiarla, viajar con ella y enseñarle que hay mucho que la vida tiene para ofrecernos.
Dani: Me di cuenta de que mis padres estaban un poco centrados en los niños, lo que significa que me priorizaban a mí más que a nada, por lo que definitivamente estoy agradecido. Pero renunciaron a muchas cosas para criarme y mantenerme feliz. Ahora que soy mayor y tengo mi propia pequeña familia, me doy cuenta de que mis padres merecían darse más atención como individuos y como pareja, especialmente cuando eran más jóvenes. Con eso, quiero asegurarme de equilibrar el hacer las cosas por mí y por mi familia, no uno sobre el otro.
“Quiero asegurarme de equilibrar las cosas para mí y mi familia, no una sobre la otra”.
¿A qué tipo de escuela enviará a su hijo?
Dani: La escuela apesta. Es una broma. La escuela es necesaria, no solo por lo académico, sino también por la disciplina, las habilidades sociales y la formación del carácter que un niño aprende cuando estudia en una institución, rodeado de otros niños. Dicho esto, queremos que nuestra hija esté expuesta primero a la educación tradicional, es decir, bajo un sistema educativo con maestros y compañeros de clase. Luego, tal vez más adelante, a una escuela especializada en su campo deseado.
¿Qué es lo que más te emociona?
Dani: No veo la hora de estar al lado de nuestra hija para experimentar esta hermosa y loca vida.
Lukas: Estoy muy emocionado por este nuevo capítulo en nuestras vidas, y no puedo esperar para mostrarle el mundo a nuestro pequeño.
Las entrevistas han sido editadas por su extensión y claridad.
