La detención del exitoso rapero en Guanajuato ha vuelto a poner sobre la mesa el debate acerca las detenciones y la criminalización de los consumidores de cannabis en el país.

“Si alguna vez sientes que estás en peligro, prende un porro para que venga la policía” ha sido una de las frases que por años ha servido para denunciar el abuso policial que oficiales suelen cometer en contra de las y los consumidores de marihuana en el país.

Y es que no es un secreto que, pese a la ardua lucha por regularizar el cannabis, su consumo sigue siendo un tabú en la sociedad mexicana, pues tanto la planta como sus consumidores continúan estando ligados a una gran cantidad de estereotipos y prejuicios que culminan en detenciones, tal y como pasó recientemente con el exitoso rapero mexicano Ángel Quezada, mejor conocido como Santa Fe Klan.

A través de sus redes sociales, el intérprete de Mar y Tierra pudo capturar el momento exacto en el que elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Guanajuato lo detuvieron mientras grababa un video promocionando su próximo concierto en la Arena Ciudad de México. ¿El motivo? Santa Fe Klan transitaba en vía pública fumándose un cigarro de marihuana.

En la grabación se aprecia cómo una patrulla de la mencionada dependencia aparece de la nada detrás del famoso rapero mexicano, quien al percatarse de la presencia de la autoridad trata de huir. Sin embargo, más adelante es abordado por los oficiales que le cuestionan sobre lo qué está haciendo e incluso, le piden abrir la pequeña mochila que Santa Fe Klan llevaba para revisar sus pertenencias.

Como era de esperarse, la grabación causó gran controversia entre usuarios de redes sociales quienes se solidarizaron con el cantante y argumentaron que su detención fue injusta ya que en México sí está permitida la portación de marihuana para su uso lúdico pero ¿Qué dice la ley al respecto?

Regulación de la portación y consumo de marihuana

En algunos países como Uruguay, Países Bajos e incluso algunas regiones de Estados Unidos, la marihuana se ha regularizado de forma eficiente hasta alcanzar la legalidad necesaria para dejar de criminalizar a las y los consumidores.

No obstante y pese a que múltiples personalidades del mundo del espectáculo, política, comunidad intelectual y activistas se han pronunciado en favor del cannabis, en México la marihuana aún se encuentra lejos de convertirse en un producto legal, aunque sí es necesario reconocer los avances significativos que la regularización de su consumo ha tenido dentro de la normatividad mexicana.

Apenas en mayo de este 2022, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) declaró como inconstitucional el penalizar la portación de más de cinco gramos de marihuana si y solo si la persona puede comprobar que es para consumo personal, ya que lo que aún continúa estrictamente prohibido es la comercialización de la planta debido a que podría argumentarse que se está incurriendo en el delito de narcomenudeo.

Antes de dicha disposición, el artículo 478 de la Ley General de Salud estipulaba que aquella persona que portara más de cinco gramos de cannabis podría ser acreedora a una sanción de hasta tres años de prisión.

Aunque en un inicio la regularización de la marihuana en México estuvo argumentada únicamente bajo los beneficios medicinales de la planta, en 2021 la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) aprobó el uso lúdico y recreativo de la marihuana en todo el país, en un “paso histórico” para los derechos humanos en México, de acuerdo con su ministro presidente, Arturo Zaldívar.

De este modo también quedó aprobada la propuesta de despenalizar la posesión de hasta 28 gramos de marihuana únicamente para consumo personal, así como expedir permisos para autocultivo.

Desafortunadamente, la ley continúa teniendo ciertas lagunas legales que propician a las detenciones y la criminalización de las y los consumidores de marihuana, sin embargo, en el caso de Santa Fe Klan la policía sí tenía facultad para detenerlo y solicitarle una revisión ya que se encontraba fumando en vía pública y fue detenido en flagrancia.

No obstante, si el rapero mexicano comprobaba que la marihuana que portaba no sobrepasaba la cantidad permitida y que únicamente era para su consumo personal, debió haber sido dejado en libertad.