El 55% de la población mexicana podría estar contagiada por la variante ómicron, que se extiende rápidamente por el mundo.
El país latinoamericano no para de alcanzar récords de contagios por coronavirus. Con más de 49.000 casos diarios, según cifras oficiales, se mantiene como uno de los principales focos de la pandemia en la región.
Por ello, este informe del Instituto de Métricas y Evaluación de la Salud de la Universidad de Washington ha encendido las alarmas. De acuerdo con los expertos estadounidenses, México podría tener a más de la mitad de su población contagiada de COVID-19 en las próximas semanas.
“Esperamos que más del 55% de la población mexicana se infecte con ómicron en las próximas 3-4 semanas”, detalla el estudio, publicado con fecha original del 8 de enero de 2022.
Los analistas también señalaron que existen pruebas suficientes de que el virus se transmite de forma “extraordinariamente rápida” y que su prevalencia comunitaria es “extremadamente alta”.
Según la Universidad de Washington, las infecciones alcanzarán un pico de 2 millones de contagios por día para finales de enero, aunque hay algunos estados donde esas cifras récord podrían alcanzarse hasta marzo. Esas entidades son Campeche, Chiapas, Jalisco, Estado de México y Tlaxcala.
Los números de esta institución son mayores a los que estima el Gobierno mexicano, que hasta el momento sólo registra más de 49.000 contagios diarios de COVID-19.
La cuarta ola de contagios en México no ha derivado en confinamientos o suspensión de actividades económicas. El Gobierno ha enviado mensajes de calma a la ciudadanía, e incluso el presidente Andrés Manuel López Obrador afirma que la variante ómicron no representa tanto riesgo.
“Esta variante del COVID no tiene la letalidad ni la peligrosidad de la variante anterior, de la llamada Delta. Esta variante produce síntomas muy leves. Es el equivalente a una gripe. No tuve un tratamiento especial”, dijo el mandatario durante su fase de recuperación tras haber dado positivo a la enfermedad por segunda vez.
Sin embargo, el informe de la Universidad de Washington indica que las hospitalizaciones aumentarán a un pico que, si bien será más bajo que el alcanzado durante el invierno pasado, sí será similar a lo registrado en agosto de 2021.
“No se espera que las muertes diarias aumenten sustancialmente a nivel nacional debido a que el ómicron es menos severa y no reemplaza al delta, que es más grave”, precisó la institución médica.