El diplomático ruso señaló que la presión de varios sectores al país al presidente López Obrador por su postura hacia Moscú no funcionará.

El embajador ruso en México, Víktor Koronelli, aseguró que las presiones que ha ejercido la oposición y otros actores políticos al presidente del país, Andrés Manuel López Obrador, no influirán en la postura del Ejecutivo respecto a la situación en Ucrania.

El mandatario mexicano es un personaje político con gran experiencia que no dejará de ser firme en sus decisiones a pesar de las presiones que partidos contrarios al presidente pueden ejercer contra él, aseveró Koronelli.

“Andrés Manuel López Obrador es un político de gran experiencia, competente e independiente que cuenta con el apoyo firme de la mayoría de la población del país. En tal sentido, ninguna presión sobre él puede influir en sus decisiones”, dijo el representante ruso.

En México, partidos de oposición al Gobierno de López Obrador han condenado la postura neutral adoptada por el presidente y han exigido posicionamientos a favor de Ucrania; sin embargo, el mandatario ha asegurado que al país latinoamericano no le corresponde imponer sanciones contra Rusia.

Otro tema que dividió a los partidos mexicanos fue la instalación del Grupo de Amistad entre México y Rusia; por ejemplo. Movimiento Ciudadano condenó el acto e incluso se manifestó en el Congreso, mientras que la embajadora de Ucrania en el país, Oksana Dramaretska, calificó el encuentro como “una vergüenza”.

Tras la creación de dicho grupo, el congresista estadounidense Vicente González pidió al Gobierno de Joe Biden retirar la visa a los diputados mexicanos que participaron en la reunión con las autoridades de representación de Rusia.

Al respecto, el embajador Koronelli sentenció que la acción del congresista de Estados Unidos es una intervención a los asuntos interiores de México.

“Esta actitud arrogante de los representantes de Washington corresponde al rumbo general de la política estadounidense de usar la presión y sanciones en campos diferentes a los Estados soberanos para conseguir sus objetivos”, enfatizó el embajador ruso.

Sobre las presiones que la embajadora de Ucrania, Oksana Dramaretska, ha ejercido al Gobierno de México para posicionarse contra Rusia e insistir que México imponga sanciones, Koronelli aseveró que estas acciones “rayan en una histeria desbordada”.

“Andar criticando y prácticamente amenazando al Gobierno del país anfitrión, intentar reclutar a mercenarios extranjeros, extorsionar a un Estado tradicionalmente neutral para que envíe armas a una parte de conflicto o se sume a unas sanciones notoriamente ilegítimas y perniciosas para quienes las imponen. Todos esos, para mí, son ejemplos de una actitud incompatible con los principios y normas básicos de la diplomacia”, dijo.