En la planta principal contiene en el suelo 141 esvásticas o cruces gamadas, vinculadas en el imaginario social con el Tercer Reich, el nazismo y el mandato de Adolf Hitler en Alemania.
Se trata de la Catedral de Tampico, principal puerto del estado de Tamaulipas en frontera con Texas, edificada entre 1841 y 1922, es decir, 11 años antes del ascenso de Hitler al frente de la nación alemana.
Entonces, ¿qué hacen esas cruces gamadas en su interior?
La iglesia en cuestión fue parroquia de Tampico hasta 1922, cuando se le concedió la sede episcopal a la ciudad portuaria, lo que condujo a que se consagrara como catedral en 1931, de acuerdo con información del Gobierno de México.
“El edificio tiene forma de cruz latina con tres naves y estilo esencialmente neoclásico, bóveda de crucería. Después del derrumbe de su torre izquierda en los años 30, se hicieron modificaciones”, apunta el registro cultural mexicano.
Los ornamentos ahora asociados a la cultura nazi fueron aplicados en el templo en 1926.
A pesar de que la cinematografía y la historia del siglo XX asocian ese ícono con el avance alemán sobre Europa durante la Segunda Guerra Mundial, la esvástica tiene varios significados culturales y religiosos muy previos, como la representación de la luz solar en la religiosidad persa.
También puede ser representación del Cristo, el sol verdadero y la luz eterna que acompaña a los difuntos.
Anteriormente, representaba la combinación de la cruz cristiana con la rueda, que podría representar el sol o bien la eternidad, el continuo, como en el arte islámico que busca la diversa representación del uno, el dios único.
Así, a pesar de la posible incomodidad de la fotografía, el suelo de la catedral de Tampico no es un elogio de la política nazi sino que apela a su propia tradición simbólica y religiosa.