El testimonio de Emilio Zebadúa indica que el dinero transferido en beneficio de Peña Nieto ascendió a 1,267 millones de pesos.

De acuerdo con las declaraciones del exoficial mayor de la extinta Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Emilio Zebadúa, los recursos que se desviaron en la Estafa Maestra sirvieron para pagar adeudos de la campaña presidencial del expresidente Enrique Peña Nieto.

La Fiscalía General de la República (FGR) de México utilizó una declaración de este exfuncionario federal para imputar a otra persona cercana a Rosario Robles, quien presuntamente encabezó uno de los mayores escándalos de corrupción en la historia reciente del país latinoamericano.

El nuevo imputado ante un juez federal es Enrique González Tiburcio, quien era exsubsecretario de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) y uno de los principales aliados de Robles, que actualmente se encuentra presa por presuntamente haber encabezado el desvío de recursos de más de 5,000 millones de pesos (250 millones de dólares) desde la dependencia que estaba a su cargo: la extinta Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol).

En este testimonio —difundido en diarios como Reforma y El Universal—, se acusa directamente que una parte de ese dinero fue destinado para pagar diversas deudas y gastos de la campaña presidencial de Enrique Peña Nieto, quien gobernó México de 2012 a 2018, antes de que López Obrador entrara al poder.

Según la FGR, Rosario Robles ordenó tejer una estrategia para transferir esos recursos a través del programa Cruzada Nacional contra el Hambre, con el cual el gobierno mexicano planeó combatir la pobreza alimentaria.

El testimonio de Emilio Zebadúa indica que el dinero transferido en beneficio de Peña Nieto ascendió a 1,267 millones de pesos (unos 60.3 millones de dólares) y fue autorizado previamente por quien entonces era secretario de Hacienda y Crédito Público: Luis Videgaray.

Zebadúa contó a las autoridades federales mexicanas que Rosario Robles tuvo conocimiento de las irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) sobre los convenios de colaboración que permitió el desvío de recursos, informó El Universal.

La Estafa Maestra es uno de los mayores escándalos de corrupción en México y se dio a conocer a la opinión pública luego de una investigación periodística realizada en septiembre de 2017 por el portal Animal Político y la organización civil Mexicanos Contra la Corrupción y la Impunidad (MCCI), todo con base en informes de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).

Según lo reportado, el Gobierno mexicano utilizó 128 empresas fantasma para desviar unos 400 millones de dólares desde 11 dependencias gubernamentales, entre ellas la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), que encabezaba Rosario Robles, y Petróleos Mexicanos (Pemex), que era dirigido por Emilio Lozoya, actualmente preso por los delitos de delincuencia organizada, cohecho y operaciones con recursos de procedencia ilícita, tanto por el caso Odebrecht como por el de Agronitrogenados.