La cantante, modelo e intérprete de ‘Baywatch’ proviene de una familia humilde de Ohio y siempre quiso conquistar Hollywood. Ahora busca “controlar” su carrera en la plataforma de adultos OnlyFans.
Desde bien pequeña Carmen Electra, cuyo verdadero nombre es Tara Leigh Patrick, quiso ser una estrella. Dado que su padre y su madre habían trabajado con la leyenda del funk Bootsy Collins (él, como guitarrista; ella, como corista), siempre apoyaron sus aspiraciones artísticas. Ambos no solo financiaron sus estudios de ballet, danza moderna y coro en la prestigiosa School for Creative and Performing Arts de Cincinnati; además, al cumplir la mayoría de edad, la alentaron para que abandonara el nido familiar. De este modo fue cómo dejó atrás su Ohio natal y puso rumbo a Los Ángeles. Un rumbo que ha cambiado a lo largo de su vida y que, en los últimos días, a sus 50 años recién cumplidos, ha vuelto a tomar protagonismo porque ha abierto un perfil en la red de contenido para adultos OnlyFans. Algo que ella justificó argumentando que quería tener “el control creativo” sobre su carrera. Sus fotos en lencería, bañador o de zapatos de tacón se pueden ver en la plataforma de pago desde el pasado miércoles 18 de mayo.
Lejos queda ya aquella Carmen Electra que intentó abrirse camino en Hollywood acudiendo a todo tipo de audiciones. Nadie apostó por ella. Aunque su situación cambió cuando una madrugada, bailando en un club, la cantante Robin Power se le acercó y le comentó que podría encajar en una banda femenina que estaba formando Prince. “Lo siguiente que sé es que estoy en su casa. Estaba muy tranquilo, lo que me puso aún más nerviosa. Me dijo: ‘Quiero que cantes algo’. Se acercó al piano y tocó Do-Re-Mi, de Sonrisas y lágrimas. Afortunadamente, yo había participado en ese musical, por lo que me sabía la canción”, rememoró Electra en 2014 sobre aquel primer encuentro en The Huffington Post.
Su destino cambió repentinamente en 1996 al protagonizar su primera portada para la edición estadounidense de Playboy. “Sinceramente, era muy tímida la primera vez que posé. No sé cómo lo superé. Una vez lo hice, me di cuenta de que en Playboy eran muy respetuosos. Al ver las fotos tuve que pellizcarme. No podía creer que estuviera realmente en la revista y que fuera a formar parte de una época tan icónica. Marilyn Monroe empezó en la misma publicación, y esas son las mujeres que admiro y en las que realmente me he inspirado”, confesó en 2019 en una entrevista a Fox News.
En lo estrictamente laboral, sus años más memorables fueron 1997 y 1998: aparte de presentar el programa de citas Singled Out, del canal MTV, se coló en los televisores de medio mundo gracias a su papel de Lani McKenzie en la exitosa serie Los vigilantes de la playa.Únicamente participó en 22 episodios de la octava temporada, pero tras aquello se transformó en la estrella que siempre había anhelado. Como señaló en Fox News, todavía le cabe el célebre bañador rojo. Lo tiene enmarcado en una pared de su salón.
Más allá de sus triunfos televisivos, por entonces también acaparó las portadas de la prensa del corazón por la tumultuosa relación que mantuvo con Dennis Rodman. Se casaron el 14 de noviembre de 1998 en Las Vegas, pero el jugador de los Chicago Bulls solicitó la anulación del matrimonio apenas nueve días después, alegando que no estaba en su sano juicio la noche en la que pronunció las palabras “sí, quiero”. Poco después se reconciliaron, pero terminaron divorciándose en marzo de 1999.
El porqué de esa boda tiene una explicación. En agosto de 1998 fallecieron dos de sus mayores pilares: su madre, de un tumor cerebral, y su hermana, de un ataque al corazón. “Estaba completamente insensible. Dennis era una persona muy divertida y salíamos todas las noches. Recuerdo haber pensado: ‘Esta es mi salida. Solo voy a divertirme y no voy a preocuparme por nada’. Por eso nos casamos”, detalló en la revista Glamour en 2004. “Supongo que estaba tratando de aferrarme a lo que tenía. No quería perder a nadie más. Cuando empecé a pasar por momentos muy duros con él, me volví adicta a sentir ese dolor en lugar de lidiar con mis sentimientos por mi madre y mi hermana”.
Carmen Electra jamás ha vuelto a emular un éxito tan sonado como el de Los Vigilantes de la playa. No obstante, al menos hasta 2018, no cesó de aparecer en franquicias como la de Scary Movie y protagonizó algún que otro cameo en pequeñas producciones televisivas. Ocasionalmente también actuó junto a The Pussycat Dolls y lanzó varios temas (su último sencillo, Around the World, data de 2014). Y, aprovechando el boom de la telerrealidad, en 2003 se prestó a que las cámaras de la MTV registraran los preparativos de su boda con Dave Navarro, el guitarrista de la banda Jane’s Addiction, en el programa Til Death Do Us Part: Carmen and Dave.
En lo que respecta al amor, la estadounidense no ha tenido mucha suerte. En el verano de 2006 tramitó el divorcio de Navarro y, entre 2008 y 2012, estuvo con Rob Patterson, miembro de los grupos Otep y Filter. Desde entonces no se le ha conocido ninguna otra pareja. Recién cumplidos los 50 años (el pasado 20 de abril), y con 1,3 millones de seguidores en Instagram, actualmente se mantiene de lo más ocupada promocionando Gogo Skincare, la línea de cremas faciales que lanzó en 2020. Y, también, proveyendo de contenido a sus más de 55.000 seguidores de OnlyFans.