El Gobierno de México pretende que con dicha estrategia se generen más empleos, mediante una operación coordinada que supone la articulación de nuevas refinerías y la modernización de las existentes, señaló el presidente Andrés Manuel.

Modernizar seis refinerías, concluir y hacer operativa la refinería de Dos Bocas, beneficiarse de la adquisición de la refinería de Deer Park, la cual estará liquidada en enero de 2022, y echar a andar la planta coquizadora de Tula, Hidalgo, para aprovechar el combustóleo, es con lo que se pretende que México tenga abastecido su consumo interno, reveló el mandatario.

La planta hidalguense estaba obstaculizada por deudas y demandas, por lo que tomó tiempo resolver el caso para continuar con su construcción, señaló en la conferencia matutina de este lunes 27 de diciembre.

“Se echó a andar ya la coquizadora de Tula, que quedó inconclusa, esa es una planta muy importante porque va a producir más combustible, gasolinas, con combustóleo. Se le da un precio adicional al combustóleo, convirtiéndolo en gasolina, con esta planta y además se evita la contaminación que significa el combustóleo”, indicó.

“Esa planta se inició hace ocho, 10 años, pero cuando llegamos estaba parada porque estuvo envuelta en los problemas de corrupción de Odebrecht, entonces se llegaron a invertir 2.000 millones de dólares y estaba ahí la planta”, describió el presidente.

No sólo se busca dejar de comprar la gasolina necesaria al extranjero, dijo López Obrador, sino también generar empleos al interior de México.

En la modernización de las seis refinerías se han invertido alrededor de 30.000 millones de pesos, recordó el mandatario, porque acusó que fueron dejadas en el abandono.

La refinería de Dos Bocas, en tanto, se espera que procese 340.000 barriles diarios de crudo, mientras que la coquizadora de Tula procesará 1,9 millones de barriles diarios.

“Consideramos que con eso podemos abastecer el mercado interno, ese es el cambio que se está llevando a cabo con el apoyo de los trabajadores, de los técnicos, de los que están ahí día y noche trabajando, haciendo ellos, como no se hacía, las reparaciones, ya no todo es contrato”, dijo.

“Se están utilizando todos los talleres que existían en las refinerías y, con la especialidad, la creatividad de los obreros petroleros, estamos reparando, rehabilitando todas las refinerías”, reiteró.

La refinería de Dos Bocas, Tabasco, se construye ahí porque ese destino era ya la terminal de petróleo más importante del país, dijo el mandatario, depositario de todos los ductos de crudo provenientes de la tierra y del mar de Campeche.

“Ahí se almacena el crudo de todas las especificaciones, el crudo ligero, el crudo pesado, ahí se hacen las mezclas”, detalló López Obrador.