El presidente negó que esté tratando de ocultar información sobre las megaobras y sostuvo que en su gobierno no son corruptos.

El presidente Andrés Manuel López Obrador defendió el nuevo decreto emitido la tarde ayer para catalogar como “seguridad nacional” las megaobras que lleva a cabo su gobierno y acusó a la Suprema Corte y al “poder conservador” de estar en contra de su administración.

“No significa que no se va a informar, pero engañaron, pero como hay mucha gente que tiene ganas de que les digan mentiras acerca de nosotros, aunque sean mentiras: tú miénteme si se trata de Andrés Manuel o de AMLO, o del Peje, creo todo lo que me digas”, ironizó el mandatario federal luego que el acuerdo (decretazo) que emitió en 2021 para acelerar los trámites de sus obras insignias fue anulado por la Corte al considerar que obstruye el derecho a la información y la transparencia a la que está obligado el gobierno.

El presidente de la República justificó esta nueva medida debido a que un bloque de oposición “irresponsable y mafiosa” no desea el progreso del sureste del país, y tras el revés de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) para invalidar el primer decreto de 2021, ahora se tiene que proteger a sus grandes obras.

Por ello, el mandatario decretó establecer como una zona de seguridad nacional la región de la Península de Yucatán: aeropuertos (Chetumal, Tulum y Palenque), puertos marítimos y ferrocarriles (Tren Maya y el Corredor Interoceánico).

El mandatario afirmó que, aunque no es la intención prioritaria, el decreto con el que contestó a la SCJN tras el revés sobre la transparencia y acceso a la información de las grandes obras públicas como el Tren Maya, este sirve para protegerse de supuestos intereses y la mala actuación de los magistrados.

“Sí es protegernos hasta de la Corte por lo que estamos viendo, porque no le tenemos confianza”, indicó.

El Ejecutivo federal reprochó que las organizaciones civiles que promovieron amparos contra las obras del Tren Maya fueron asesoradas por el ex secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, y el ex ministro de la Corte, Jose Ramón Cossío, razón por la cual de decidió a blindar los proyectos federales a través de un decreto presidencial.

Tenían olvidado al sureste

Al hablar sobre la importancia del Tren Maya en el sureste del país, el presidente López Obrador destacó que durante los gobiernos de Benito Juárez y Sebastián Lerdo de Tejada se construyó una red ferroviaria para detonar el crecimiento económico de los estados de la península, pero ya en el periodo neoliberal se abandonó a esta región.

“Es una obra muy importante que se concibió desde el gobierno del general Cárdenas, la integración del sureste a través del ferrocarril”, dijo esta mañana sobre el rescate del sureste que emprendió su administración.

“Tenían tan abandonado el sureste que ni siquiera concesionaron o no les importó entregar la concesión del ferrocarril del sureste ni la del Istmo. No les interesaba el sureste ni siquiera para robar”, dijo el mandatario federal.

AMLO respondió a la Corte con un nuevo decreto

Este jueves 18 de mayo, el Pleno de la Suprema Corte declaró la invalidez del decreto emitido en 2021 por el presidente López Obrador para clasificar las megaobras de su gobierno como “seguridad nacional y de interés público”, a fin de saltarse trámites burocráticos y también para evitar recursos y amparos de organizaciones civiles.

Luego de la decisión de la Corte, el presidente de la República publicó un nuevo decreto para catalogar al Tren Maya y otros proyectos federales como temas de seguridad nacional e interés público, por lo que daría la vuelta, por ahora, a la resolución del máximo tribunal.

El presidente aseguró que la finalidad del decreto no es ocultar información sino asegurar que el proyecto avance a la mayor velocidad posible, pues tiene el compromiso de inaugurar el Tren Maya en diciembre de 2023.