Amor búmeran es cuando una pareja termina y regresa constantemente porque no puede dejarse.
El búmeran es un juguete que se lanza pero siempre regresa a su punto de origen, va y viene, va y viene; pues hay un tipo de relaciones románticas que funcionan igual y por eso los terapeutas las llaman amor búmeran o amor yo-yo.
La característica principal de este tipo de relaciones es que los integrantes de la pareja se la pasan terminando y regresando constantemente, pero siempre aseguran que la última será la definitiva; aunque en realidad no es así porque no pueden soltarse.
En estas relaciones es como estar sobre la montaña rusa todo el tiempo, en momentos disfrutando estar arriba y luego entristecer al bajar. Si tuviéramos que definir lo que viven las parejas con amor búmeran sería: amor-ansiedad-amor-ansiedad y así una y otra vez.
Y aunque cueste trabajo entenderlo, este tipo de relaciones pueden satisfacer y causar placer a algunas parejas porque las reconciliaciones son intensas, pero igual lo son las rupturas. Como lo dije, esto funciona para las personas que encuentren gusto en la intensidad y/o que tengan temas emocionales por resolver como los siguientes:
- No estar disponible emocionalmente: Existen personas que no se atreven a aceptar que no están listas para construir una relación estable, pero aún así lo intentan. Entonces cuando las cosas se ponen formales, necesitan huir, pero después el deseo por su pareja las hace volver y allí es cuando ocurre el amor búmeran.
- Dependencia emocional: Todas las personas experimentamos un apego emocional en el momento que forjamos un vínculo con otra persona, esto no es lo mismo que una dependencia. Las terapeutas de Somos Estupendas aseguran que el apego hace que se generen vínculos, mientras que la dependencia genera sufrimiento en éstos.
La dependencia emocional hace creer a las personas que su felicidad depende del vínculo con su pareja y por ello no pueden soltarla y entonces anteponen las necesidades del otro a las suyas.
Las especialistas de Somos Estupendas recomiendan poner límites y mejorar la autoestima para poder acabar con esa dependencia.
- Miedo a la soledad: Es cuando la persona piensa que cualquier cosa es mejor que estar sola o que nunca más se enamorarán o encontrarán a alguien que les encante tanto como la pareja actual.
- Idealización del amor romántico: Las expectativas puestas en la pareja hacen que las personas esperen todo el tiempo conductas y acciones del otro que no sucederán. Y cada que retoman la relación piensan que es una nueva oportunidad para cumplir con todo lo que su mente idealiza.
- Confianza quebrada: Hay personas que terminaron con la confianza destruida en sus relaciones anteriores y no han podido sanar, por lo que todo el tiempo están poniendo a prueba a sus parejas actuales para saber si realmente las quieren y las valoran. Esto hace que el otro se desgaste con tantas pruebas y decide irse.
Para que suceda un amor búmeran ambos involucrados en la relación deben tener alguna de las anteriores características y es por ello que no pueden terminar. Y aunque les pueda parecer increíble sí existen personas que disfrutan al máximo vivir siempre sobre una montaña rusa de emociones.
Lo más importante al relacionarte es tener el corazón abierto y la mente clara, así podrás compartirle a los demás tu esencia, así como tus límites y tus deseos. Tú y sólo tú sabes qué aceptas y qué no, qué te da placer y qué te da paz y eso es lo único que importa.
Si algo he aprendido de las relaciones amorosas es que si no te dan vida, entonces no permitas que te quiten el tiempo y la salud.
La doctora Luz de Lourdes Eguiluz, licenciada en psicología por la FES Iztacala de la UNAM, maestra en terapia familiar y doctora en investigación psicológica, asegura que las relaciones sanas son muy importantes para la salud de una persona, tanto a nivel físico como emocional.
“Las personas que tienen una mala relación de pareja también se enferman más físicamente (principalmente del corazón)”, afirma la doctora Eguiluz.
Con información de Nosotras / Por: Vanessa Pérez