Auxiliares de vuelo opinan sobre las reglas implícitas que existen en la cabina, incluyendo cuándo se puede y cuándo realmente no se puede llamarlos.

i alguna vez has volado, sabrás bien que no hay misterio más grande que el siguiente: ¿Cuándo está bien tocar el botón para llamar al sobrecargo de vuelo?

Como viajeros aéreos, todos hemos estado en esa situación. Tal vez tengas sed, hambre, algo de basura para tirar o quieras que alguien intervenga con un niño revoltoso sentado cerca de ti. El botón de la azafata (que saben trucos muy útiles para viajar en primera clase sin pagar más) brilla en la parte superior, prometiendo enviar a una amable miembro de la tripulación para resolver tus problemas. ¿Pero es de mala educación llamar a esa persona por una de estas razones?

La respuesta varía según la situación. La mayoría de las auxiliares de vuelo admiten que hay reglas de etiqueta tácitas para usar correctamente el botón de llamada que tiene en cuenta la fase del vuelo, donde está sentado un pasajero y cuál puede ser la solicitud.

Obviamente, la seguridad siempre es lo primero en lo que respecta al botón de llamada: si ves algo, di algo, y si crees que algo es inusual, alguien sufre una emergencia médica o una situación parece ser peligrosa y potencialmente podría causar una emergencia, presiona el botón y hazlo rápidamente sin pensarlo dos veces.

Fuera de los problemas de seguridad, sin embargo, el uso de esta función conlleva ciertas sutilezas. Por eso, hemos pedido a diferentes sobrecargos de vuelo que nos guíen por varios escenarios en los que está bien que los pasajeros toquen el botón de llamada y cuándo sería desaprobado por la mayoría de los miembros de la tripulación.

Aléjate del botón de llamada durante el rodaje, el despegue y el aterrizaje

Si estás considerando presionar el botón de llamada mientras el avión está acelerando por la pista para despegar, para pedirle a los azafatos un refresco o una almohada para poder dormir mejor en el avión, espera algunas miradas desaprobatorias y reprimendas por parte de la tripulación de cabina.

“Nunca está bien presionar el botón de llamada durante el rodaje, el despegue o el aterrizaje a menos que sea una emergencia”, dice la sobrecargo con sede en Boston, Kelly Casteel.

“Esas son las fases del viaje que tienen la mayor probabilidad en las que algo podría salir mal, por lo que se instruye a los asistentes de vuelo a preparar la cabina, tomar sus asientos y revisar sus procedimientos de emergencia. Eso es bastante estándar en todas las aerolíneas”.

Algunas cosas pueden esperar

Muchos miembros de la tripulación de vuelo están dispuestos a responder al botón de llamada una vez que el avión está a altitud de crucero, con una gran excepción:

“Personalmente les digo a los pasajeros que está bien presionar el botón de llamada si quieren otra bebida o snack. No soy una de esas auxiliares de vuelo que dicen que un pasajero solo puede presionar el botón de llamada si se están muriendo o sangrando”, dice Aimee LaMay con sede en Orlando.

“Prefiero que me llamen, y puedo proporcionar un servicio más personal en lugar de volver a sacar los carritos de bebidas y bloquear el pasillo y el camino al baño”.

Pero la paciencia de las auxiliares de vuelo se agota cuando se trata de limpiar la basura.

“Ninguna aerolínea tiene un contenedor de basura en el carrito de bebidas, así que, por favor, no intente entregarnos su basura mientras estamos sirviendo bebidas y comida”, dice. “Y no haga sonar el botón de llamada para que recojamos su basura”, añade LaMay.

Mantener la basura en su lugar es una regla de etiqueta común para la mayoría de los miembros de la tripulación.

“No me importa si presionan el botón de llamada si la gente realmente necesita algo, pero nunca está bien presionarlo para que recojamos su basura”, coincide Alexa Billig, sobrecargo de vuelo con sede en Los Ángeles.

Billig dice que su aerolínea, como la mayoría, requiere que los asistentes de vuelo pasen regularmente por la cabina para recoger la basura. En esos momentos, la tripulación está preparada con bolsas de basura y guantes protectores, pero no siempre responden al botón de llamada preparados para manejar algunos de los artículos insalubres que les pasan.

“Pañales sucios, uñas de los pies, semillas de girasol masticadas, restos de comida… la lista es interminable”, dice Billig. “No tocarías ni la mitad de las cosas que nos entregan sin guantes, así que lo cortés es esperar hasta que tengamos los nuestros puestos antes de esperar que nos llevemos algo”.

Depende del asiento

Para algunos miembros de la tripulación de cabina, tu derecho de acceso al botón de llamada depende de donde estés sentado en el avión.

“Si el servicio a bordo ha terminado, y el pasajero está sentado en la ventana o en el asiento del centro, puede pulsar el botón de llamada en cualquier momento”, dice la sobrecargo de vuelo neoyorquina Linda Newman. “Si estás en el asiento del pasillo, eres bienvenido a venir hacia atrás y pedir lo que necesites”.

Pero la cosa cambia cuando la tripulación de cabina está sirviendo la comida y pasando con el carrito de bebidas: llamar a los asistentes de vuelo por algo frívolo durante estos momentos es prácticamente prohibido, según Newman.

“Siempre estoy encantada de conseguir lo que los pasajeros quieren, es para lo que estoy allí, pero si obviamente estamos trabajando en el pasillo, por favor, sé respetuoso con el hecho de que generalmente hay tres asistentes de vuelo por cada 150 pasajeros, y llevará algún tiempo pasar por la cabina”.

Toca el botón, antes que al sobrecargo de vuelo

Tocar el botón de llamada para hablarle a un miembro de la tripulación siempre es una mejor idea que tocar físicamente a un asistente de vuelo para llamar su atención.

“Cualquier cosa es mejor que ser pellizcado en el costado, o por detrás, mientras se camina por el pasillo. Es mi mayor molestia”, explica Katherine Gwynn, un miembro de la tripulación con base en Atlanta.

“El botón de llamada está ahí por una razón. Los pasajeros pueden usarlo en cualquier momento que tengan una necesidad, pero por favor no toquen a los auxiliares de vuelo”.