La razón del conflicto se debe a que el Gobierno de México aumentó el desfogue de agua de la presa La Boquilla para cumplir con la entrega de 432 millones metros cúbicos de agua a Estados Unidos como lo establece el Tratado Internacional de Aguas de 1944.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que hay una conspiración con intereses políticos comandada por miembros del Partido de Acción Nacional (PAN) alrededor del conflicto en la presa La Boquilla, en el estado de Chihuahua, de cara al proceso electoral del próximo año.
Por su parte, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral, anunció el 23 de septiembre que el secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo, le notificó que las autoridades federales ya no participarían junto al Gobierno del estado en las mesas de seguridad.
El gobernador panista expuso en su cuenta de Twitter que el secretario de la SSPC argumentó que esto se debía a “las críticas del gobierno del estado a su participación en la custodia de diversas instalaciones cuya custodia es su responsabilidad constitucional, dado su carácter estratégico, generan un ambiente de confrontación que queremos evitar hasta donde sea posible”.
En respuesta, López Obrador indicó que la decisión del Gobierno federal de reunirse sin un representante estatal en las Mesas de Seguridad se debió a que se filtraba información a los dirigentes de las protestas de la presa La Boquilla.
“¿Cómo vamos a estar tratando asuntos de interés nacional cuando tenemos la oposición al interior, cuando se está conspirando en estas reuniones? Toda la información que se daba a conocer de inmediato la sabían los dirigentes de este partido, entonces así no”, expresó el mandatario en la conferencia matutina del 24 de septiembre.
Como consecuencia del disenso entre las autoridades federales y los gobiernos estatales, el bloque de gobernadores de oposición —autodenominado Alianza federalista— rechazó la decisión del Gobierno federal de salir de la coordinación de seguridad en respaldo al Gobierno de Javier Corral.
La Boquilla: entre el conflicto y la politización
La razón del conflicto se debe a que el Gobierno de México aumentó el desfogue de agua de la presa La Boquilla para cumplir con la entrega de 432 millones metros cúbicos de agua a Estados Unidos como lo establece el Tratado Internacional de Aguas de 1944.
Esta situación ocasionó que diversas organizaciones de agricultores del estado de Chihuahua se manifestaran en contra de la extracción de agua de La Boquilla, pues según acusan, se pone en riesgo el próximo ciclo de riego debido a la sequía de este año.
A pesar de ello, la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) insiste en que no faltará agua para los agricultores; además, han acusado a los manifestantes de tener intereses políticos fijados en los comicios electorales de 2021.
“Es que se metió el proceso electoral y a lo mejor están viendo encuestas, y no están muy bien parados con la gente, y piensan que con esto van a remontar, a sacar votos; pero no se vale que se actúe así, que haya irresponsabilidad y mucho menos que se arriesgue a la gente, además de un conflicto internacional. Es vil politiquería”, señaló el mandatario el día de hoy.