El canciller mexicano comparó el rendimiento de los futbolistas del combinado absoluto con el último equipo que logró consagrarse en una copa del mundo de las categorías inferiores.
La eliminación de la selección mexicana de futbol desató un sinfín de reacciones entre personajes relacionados con el deporte, aunque la crítica se extendió hasta la esfera de la política nacional. En ese sentido, el secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, lanzó una férrea crítica por el funcionamiento del equipo en el Mundial de Qatar 2022 y los comparó con los seleccionados que conquistaron la categoría sub-17 en el mundial de 2011.
Horas después del pitazo final en el Estadio Lusail, donde México consiguió la única victoria del certamen, el canciller se pronunció por medio de sus redes sociales. En su publicación se unió a las críticas realizadas en contra del plantel elegido por Gerardo Martino, pues negó que los jugadores contaron con la capacidad de representar al país en el ámbito internacional.
“Hoy vi a una selección sin capacidad de representarnos. Los campeones del mundo en 2011 nos representan. A veces se olvida y la mediocridad se extiende, pero podemos lograrlo en 2026 si nos decidimos desde hoy a ser así, sin concesiones, como en aquella ocasión imborrable”, fue el mensaje difundido por medio de su cuenta verificada de Twitter @m_ebrard.
La selección a la que hizo referencia el político mexicano es la que se coronó por segunda vez en la historia en la categoría sub-17, en el certamen realizado al interior del territorio nacional. Aquel plantel, dirigido por Raúl Potro Gutiérrez, pasó a la historia por protagonizar un histórico papel a lo largo del torneo, aunque también en la semifinal contra la selección de Alemania.
Pese a ello, Ebrard también fijó su objetivo en el Mundial de 2026. En esa edición, México compartirá la sede junto con Estados Unidos y Canadá, por lo que habrá alta expectativa acerca del papel que realice el combinado tricolor. No obstante, uno de los factores en contra será que no competirán por un boleto y el nuevo entrenador deberá buscar su mejor nivel con encuentros amistosos o torneos por invitación.