Las partes interesadas de Estados Unidos y México en la cuenca del río binacional Tijuana continúan buscando una solución permanente para mantenerlo limpio, declaró la vocera de la organización Reserva Nacional de Investigación Estuarina del Río Tijuana, Ana Xochilt Eguiarte.
“La reducción significativa de los desechos marinos en Estados Unidos requiere abordar los desafíos sistémicos en la cuenca del río Tijuana”, indicó Eguiarte al margen de la Cumbre de las Américas que se celebra en la ciudad estadounidense de Los Ángeles (suroeste),
El Río Tijuana fluye a través del territorio de México y de Estados Unidos y es famoso por estar altamente contaminado por aguas residuales sin tratar.
En agosto de 2021, más de 1,8 millones de galones de aguas residuales y vertidos urbanos sin tratar se derramaron a lo largo de la frontera entre los dos países en el Río Tijuana luego de una detención de emergencia de una estación de bombeo en el lado mexicano.
En los últimos tres años, las playas del sur del condado de San Diego permanecieron cerradas la mayor parte del año debido a la contaminación proveniente del Río Tijuana.
Desde 2010, casi 23.000 voluntarios han limpiado aproximadamente 226 toneladas de residuos marinos terrestres del Río Tijuana, dijo Eguiarte.
Los hábitats sensibles y la infraestructura crítica a lo largo del Río Tijuana se ven abrumados por los desechos sólidos durante cada tormenta, informó la vocera y agregó que es fundamental obtener más recursos inmediatos para poder eliminarlos.
Programa piloto
La Reserva Nacional de Investigación Estuarina del Río Tijuana planea lanzar un programa piloto que tiene como objetivo eliminar los desechos y fomentar el reciclaje, que es un concepto clave que ha obtenido un apoyo sin precedentes en todo el sistema global de plásticos, afirmó Eguiarte.
Sin embargo, señaló que este programa piloto podría afectar un centro comunitario en Tijuana, México, que brinda refugio de emergencia a refugiados de Haití y Centroamérica.
La rotación regular de los funcionarios del Gobierno mexicano, tanto los electos como su personal estable, también ha presentado desafíos para mantener el conocimiento y el liderazgo institucional en temas de gestión de residuos sólidos en la ciudad de Tijuana, opinó Eguiarte.
“Un ambiente sano es un derecho de la población en general y el trabajo coordinado entre países genera grandes resultados”, afirmó.
Estados Unidos y México deben sostener una cooperación permanente para atender los problemas ambientales que afectan la cuenca binacional del río Tijuana, y el primero de los enfoques es trabajar con el país latinoamericano para controlar la contaminación desde la fuente, concluyó Eguiarte.
Con información de Sputnik.
